¿Es la radiación wifi peligrosa para la salud?
Las ondas de radio que utiliza el WiFi tienen una frecuencia baja, pero aun así generan radiación electromagnética. Y a pesar de que dicha frecuencia es de pocos gigahercios, la radiación Wifi es peligrosa por los siguientes motivos:
- Hay una exposición constante a la radiación, ya que las redes WiFi están por todas partes y en casa solemos tenerlas encendidas durante todo el día. Por lo tanto, nunca llegas a tener un descanso de tu exposición a los campos electromagnéticos.
- El campo electromagnético que transporta las señales es capaz de atravesar las paredes y va a donde vayan dichas señales.
- En un momento dado, estás expuesto a distintas señales de varios routers inalámbricos. De hecho, si ahora mismo te pusieras a buscar redes inalámbricas, no te sería difícil captar la señal de al menos 2-3 routers procedentes de tus vecinos y de otras fuentes.
Los dispositivos que generan señales WiFi (como los routers, algunos módems e incluso nuestros teléfonos a través de la función de punto de acceso) emiten radiación de radiofrecuencia, que a veces se denomina como radiación de microondas. Además, los dispositivos que generan señales WiFi emiten dicha radiación de forma constante para mantener las conexiones.
La radiación de radiofrecuencia (que incluye las ondas de radio y las microondas) está en uno de los extremos del espectro electromagnético, y es una onda de baja energía. Por este motivo, se trata de radiación no ionizante: posee suficiente energía como para mover los átomos de las moléculas y provocar fricción, pero no la bastante como para arrancar una partícula cargada (es decir, ionizar).
Cuando la radiación de radiofrecuencia o de microondas se absorbe en grandes cantidades, es capaz de generar calor. De hecho, así es como calientan la comida los hornos microondas domésticos: sometiéndola a radiaciones que provocan una gran cantidad de fricción para así generar calor.
En este sentido, la radiación WiFi es peligrosa porque, según los estudios disponibles, se sabe que una exposición excesiva y a largo plazo a este tipo de radiación produce efectos negativos sobre la salud de los seres humanos. Aunque los hornos microondas están pensados para calentar la comida, producen el mismo tipo de radiación que generan los routers WiFi cuando usan las ondas de radio para transmitir datos.
Navega por el contenido
¿Cómo afecta la radiación wifi a mi salud?
Cuando los tejidos vivos absorben esta radiación, se transforma en calor. De hecho, es posible aplicar este principio para tratar enfermedades, usando sondas de radiofrecuencia para calentar y matar células cancerosas. Además, los cirujanos cardiovasculares pueden usar las radiofrecuencias para eliminar tejidos cardíacos enfermos.
Sin embargo, también es posible sufrir quemaduras por la exposición a la radiación de radiofrecuencias. Por ejemplo, las personas que se acercan demasiado a ciertas instalaciones de radar pueden llegar a sufrir quemaduras graves en el cuerpo, como si hubieran salido de un horno microondas.
Las personas expuestas a menores cantidades de radiación procedente de radares y repetidores pueden llegar a oír chasquidos debido a que los tejidos del interior de sus cabezas acaban calentándose por la radiación pulsada, por lo que se expanden y se contraen.
Ahora bien, tu router WiFi no te va a provocar quemaduras visibles. Si oyes chasquidos dentro de tu cabeza, no se deben a este motivo. Sin embargo, la radiación WiFi es peligrosa porque tiene ciertos efectos sobre tu salud.
En concreto, la radiación WiFi puede aumentar tu temperatura corporal entre 0,1 y 2,0 grados si estás lo bastante cerca. Y cuando tus células se calientan, sus enzimas funcionan con más rapidez.
Esto puede ser un problema importante para las células que se están dividiendo: las enzimas no hacen su trabajo en el momento correcto, por lo que se crean células con el ADN defectuoso. Y cuando hay errores en el ADN, las células pueden funcionar mal. En ese caso, pueden ser eliminadas por el sistema inmune junto con algunas células sanas circundantes, o pueden convertirse en cancerosas.
Por supuesto, cuantas más células se estén dividiendo en el cuerpo, más grande será el daño producido por el calor. Ése es el motivo por el que resulta tan importante que las mujeres embarazadas, los bebés y los niños pequeños se protejan frente a una exposición excesiva a la radiación WiFi peligrosa.
Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH)
La activación de las neuronas del cerebro depende del movimiento del calcio entre las células y su entorno. Los procesos que mueven el calcio para que las células cerebrales se “enciendan” de manera ordenada pueden verse alterados por las frecuencias usadas por el WiFi.
Los 29 expertos que escribieron el Bioinitiative Report afirmaron que los niños que se pasan periodos prolongados de tiempo a menos de tres metros de un router tienen mayor riesgo de sufrir este tipo de disrupción.
En este sentido, los puntos de acceso y los routers 5G exponen a todos los habitantes de un hogar a unas 250.000 veces más radiación que los routers 4G y 3G.
Ansiedad
Varios experimentos de laboratorio demuestran que la exposición a la radiación WiFi peligrosa tiene algunos de los mismos efectos sobre el cerebro que consumir demasiado azúcar. En concreto, la radiación de radiofrecuencia procedente de las redes inalámbricas aumenta la formación de radicales libres en el cerebro, lo que a su vez incrementa la sensación de ansiedad al margen de los eventos externos.
Esto no quiere decir que si tienes un router sin proteger en tu casa toda la familia vaya a sufrir un trastorno generalizado de ansiedad. Sin embargo, los niveles de ansiedad, de insomnio y de mal humor tenderán a aumentar hasta que se reduzca la exposición a la radiación de radiofrecuencia.
Problemas de aprendizaje
La exposición constante a la radiación WiFi peligrosa hace que las ratas tengan dificultades para poder salir de laberintos. Ningún científico va a soltar a la gente dentro de un laberinto para averiguar si la radiación hace que les resulte más difícil salir de él. Sin embargo, esto implica que la radiación WiFi probablemente interfiere con la capacidad de aprendizaje.
Este fenómeno se ha observado en las frecuencias de 900 megahercios y superiores. Se debe a los efectos del mayor calor sobre el cerebro, no a que la radiación provoque cambios químicos en el mismo.
Enfermedad de Alzheimer
Hay todavía más experimentos de laboratorio que han descubierto que la exposición a la radiación WiFi peligrosa aumenta la actividad cerebral en ratones que padecen un problema cerebral análogo a la enfermedad de Alzheimer.
En principio, esto parecería algo bueno, ¿verdad? Sin embargo, hay un problema importante: aumentar la actividad del cerebro sin recuperar las capacidades cognitivas suele ser desastroso en las personas que padecen la enfermedad de Alzheimer.
Por ejemplo, las personas mejoran lo justo para empezar a deambular. O su capacidad para percibir el mundo que les rodea aumenta lo suficiente como para hacer que se vuelvan hostiles hacia sus cuidadores. Por lo tanto, un aumento de la “actividad” no suele ser algo deseable en los pacientes con Alzheimer.
No existe una evidencia clara que respalde que la exposición al WiFi provoca Alzheimer. Sin embargo, esto puede deberse a que las personas que son lo bastante mayores como para tener esta enfermedad no han sufrido una exposición a lo largo de todas sus vidas.
Cáncer
La postura oficial con respecto al WiFi y al cáncer es que es “posiblemente cancerígeno”. Por supuesto, no todas las personas que tienen una conexión inalámbrica a Internet en casa van a desarrollar cáncer. Sin embargo, dado que se trata de una enfermedad provocada por errores en la división de las células, el riesgo de sufrir cáncer parece mayor en las personas expuestas a la radiación WiFi peligrosa. Además, los científicos destacan que estos errores en el ADN se acumulan tanto en el cerebro como en el corazón.
Infertilidad masculina
El esperma expuesto a la radiación WiFi peligrosa pierde su “capacidad para nadar”. Por lo tanto, los hombres que se ven expuestos constantemente a esta radiación siguen produciendo esperma, pero éste no logra alcanzar su destino.
Un estudio italiano descubrió que pasar cuatro horas a un metro de un router o un ordenador portátil puede hacer que el esperma expuesto se vuelva inactivo. El cuerpo de los hombres está produciendo constantemente más esperma, pero una fertilidad óptima implica el uso de protección anti radiación o pasar al menos 48 horas alejado de redes WiFi antes de mantener relaciones sexuales con la intención de tener hijos.
Niveles seguros de exposición
Los expertos en radiación han establecido que la exposición segura máxima a la radiación de radiofrecuencia es de 30 microvatios por metro cuadrado de superficie corporal. En este sentido, si tienes una conexión WiFi sin proteger, en la mayoría de los lugares de tu casa te verás expuesto a un nivel de exposición igual o inferior.
Sin embargo, un estudio publicado en el Bioinitiative Report descubrió que pasar unos seis minutos a menos de un metro de un router u otra fuente de WiFi te podrá exponer a hasta 3000 microvatios por metro cuadrado. Esto supone una cantidad 100 veces superior a los niveles seguros. Además, esta exposición será mucho mayor si usas una conexión 5G.
Cómo bloquear la radiación wifi
La conclusión de todo lo anterior es que si quieres protegerte de la radiación WiFi peligrosa, debes bloquearla. En un mundo ideal también tendríamos que bloquear todas las señales de los routers de nuestros vecinos, pero eso sería increíblemente difícil.
Si por cualquier motivo este bloqueo resulta imposible, la siguiente recomendación sería limitar la exposición tanto como puedas. A continuación hablaré sobre estas dos opciones, así que seguro que encontrarás algo que te funcione en tu caso.
Coloca una carcasa anti radiación
La primera opción para bloquear la radiación WiFi peligrosa consiste en instalar una carcasa anti radiación. Cada empresa utiliza materiales diferentes, pero la carcasa siempre debería estar hecha de un metal conductor.
Idealmente, una de estas carcasas debería bloquear prácticamente todas las señales de radiofrecuencia emitidas por el router, pero aun así tendría que dejar que siga funcionando. Después de todo, un router es bastante inútil si no puede generar una señal WiFi.
Por lo tanto, a la hora de protegerte de la radiación WiFi peligrosa debes tener en cuenta que dispones de dos opciones: dejar que se escapen parte de las señales o bloquear el router por completo.
Obviamente, una carcasa anti radiación que bloquee el 99% de la radiación seguirá dejando pasar un 1%. Se trata de una reducción enorme en la cantidad de radiación electromagnética que experimentarás en tu casa. Sin embargo, si no es suficiente y quieres un bloqueo completo, entonces puedes probar otras opciones.
Lo que hace que una carcasa anti radiación sea una gran alternativa es que puedes quitarla siempre que lo necesites. Esto hace que se trate de una opción temporal fantástica en caso de que consideres que no necesitas un bloqueo permanente.
Usa tela de Faraday
Si quieres bloquear por completo la radiación WiFi peligrosa, entonces la mejor opción es usar una tela de Faraday. Básicamente, se trata de un material muy conductor que bloquea la señal y conecta el router a tierra.
Esta tela viene en láminas, por lo que tendrás que crear algún tipo de carcasa o funda para tu router. Sin embargo, esto te resultará bastante sencillo, porque esta tela se puede doblar para darle la forma que necesites.
Al contrario de lo que ocurre con la carcasa anti radiación que mencioné antes, este producto bloqueará por completo la señal WiFi, incluyendo la poca que puedas necesitar. Por lo tanto, es una buena opción si tu objetivo es bloquear por completo la señal de tu router.
Ahora bien, aunque es posible crear una funda para tu router usando este tipo de tela, probablemente sea más útil para proteger una estancia o una zona concreta. Por ejemplo, puedes instalar tela de Faraday en tu dormitorio para protegerte de todas las fuentes de radiación electromagnética, y no sólo de tu router.
Usa una jaula para tu router
Otra opción para bloquear la radiación WiFi peligrosa consiste en usar una jaula para tu router. Se trata de jaulas de Faraday diseñadas específicamente para los routers. Su finalidad es bloquear por completo las señales para evitar que escapen. Para conseguirlo, atenúan la mayoría de la radiación que generan estos dispositivos, y algunas incluso se pueden conectar a la toma de tierra de un enchufe. Sin embargo, no siempre es así.
Una de las características más interesantes de las jaulas para routers es que te permiten seguir usando el WiFi en tu casa. Eso sí, la mayoría de los fabricantes avisan de que la jaula tendrá un impacto en el alcance de la red WiFi, llegando a reducirla en hasta un 40%.
Aunque esto no es importante para quienes vivan en propiedades pequeñas, merece la pena tenerlo en cuenta si vives en una casa más grande. Además, la mayoría de los routers WiFi son lo bastante potentes como para mandar una señal a más de 10 metros, así que tenlo en cuenta.
Una jaula para routers es una buena opción si quieres reducir la radiación a la vez que sigues usando la red WiFi. Sin embargo, si quieres bloquear por completo todas las señales de radiofrecuencia, debes buscar un producto diferente.
Utiliza pintura anti radiación
Una buena opción en caso de que quieras evitar que las señales electromagnéticas entren en una habitación específica consiste en usar una pintura anti radiación. Así que en lugar de aplicar la solución directamente al router, la idea es proteger una habitación entera de las distintas señales.
Esta pintura contiene partículas metálicas que ayudan a atenuar las señales, evitando así que entren en un espacio concreto. En este sentido, debes tener en cuenta que algunas marcas ofrecen productos más eficaces que otras.
Además, ten en cuenta que la pintura anti radiación es cara. Y si quieres una protección efectiva para una estancia, tendrás que pintar las paredes y posiblemente también el techo. Esto puede llegar a ser bastante caro, ya que podrías tener que aplicar varias capas.
También merece la pena mencionar que esta pintura no es un acabado, por lo que tendrás que pintar sobre ella. Así que sólo la recomiendo como opción si te estás planteando cambiar la decoración de la estancia de todos modos.
Por otra parte, la pintura anti radiación no bloqueará por completo todas las señales. Algunos fabricantes afirman que pueden bloquear el 99,8% de la radiación electromagnética, pero esto variará dependiendo de la aplicación y del entorno.
Aunque se trata de una opción bastante cara, puede merecer la pena en caso de que quieras que una habitación esté totalmente libre de radiaciones electromagnéticas y de que vayas a cambiar la decoración de todas maneras.